En 1953, Saarinen comienza a diseñar La Capilla Kresge y el auditorio de Massachusetts Institute of Technology (MIT). El reto era reunir a los peregrinos, además de captar la atención hacia el altar. De tal modo, fue necesario el uso de la luz cenital acompañado por una serie de espejos que realzan el interior. Después de su construcción en 1955, esta iglesia tuvo una serie de críticas, ya sea por que drenaba el agua a través del techo o por la rápida corrosión de la estructura.
El arquitecto Imrich habla sobre la gran influencia que tuvo esta obra de arquitectura en su carrera. Fuera de las críticas, esta iglesia, interiormente, es cautivadora. La intensidad de la luz cenital y el peso que le otorga el ladrillo hacen de este edificio un instrumento para sacar a relucir las emociones. Esto es importante, cuando se pretende realizar edificaciones con una identidad religiosa.
El arquitecto Imrich habla sobre la gran influencia que tuvo esta obra de arquitectura en su carrera. Fuera de las críticas, esta iglesia, interiormente, es cautivadora. La intensidad de la luz cenital y el peso que le otorga el ladrillo hacen de este edificio un instrumento para sacar a relucir las emociones. Esto es importante, cuando se pretende realizar edificaciones con una identidad religiosa.
video: Architectural Record
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